BORDADO SOBRE MUJERES CIENTÍFICAS
B
ordar suele ser visto como un quehacer femenino, que aunque pueda ser remunerado, se ejerce en casa, en los pocos tiempos libres que dejen las tareas domésticas. Esta asociación entre el bordado y la mujer es tan antigua, y está tan arraigada como una formación que solía ser básica entre las jovencitas antes de casarse, que muchas mujeres actuales rechazamos. En los colegios femeninos religiosos era usual recibir las clases de costura por parte de una mujer, muchas veces una religiosa. Y se exigía un nivel de concentración y de laboriosidad que podían terminar en hilos desordenados y en trabajos sin terminar. Porque era una exigencia, más no una elección.
En los últimos años, empecé a escuchar sobre las bondades de las actividades manuales para mejorar el estado de ánimo, y los niveles de atención, en medio de los trajines y afanes de la cotidianidad. Así fue como surgió el deseo de conseguir de nuevo cañamazo, e hilo, para reaprender esa técnica que había conocido en quinto de primaria en un colegio religioso antioqueño. No sabía los nombres de las puntadas, ni los tipos de telas o hilos…solo que con el punto de cruz y algunas telas preimpresas podía reenfocar mi atención durante varias tardes.
Hubo alegría cuando supe en 2021 que, en el Planetario de Medellín, había una nueva astrónoma que sabía bordar, y que quería ofrecer algunas sesiones para las interesadas en aprender a hilar con temáticas astronómicas. Aprendí, así, a entrelazar hilos dorados con pepitas del mismo color para armar la constelación de Pegaso. Y luego, la técnica con punto de cruz para crear un tejido con la figura del planeta Tierra, y hasta de agujero negro. Por eso, en 2023, cuando se ofreció el primer club de bordado, me inscribí. A lo largo del primer semestre nos reunimos, una vez al mes, casi todas mujeres, a bordar al menos tres constelaciones del cielo. Al finalizar, recreamos, entre todas, ambos hemisferios de la bóveda celeste, y tuvimos nuestra primera exposición.
Conoce el texto completo en la Circular 996 página 4
Luz Angela Cúbides González
Astrónoma y docente
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